Que el paisaje de Bardenas Reales no deja indiferente a nadie es algo que puede afirmar cualquiera que las haya visitado o haya visto fotos o vídeos. Lo que tal vez no es tan conocido es el largo proceso geológico que ha dado origen a este increíble escenario de película (si, si, de película, desde algún film de James Bond hasta, recientemente, capítulos de Juego de Tronos has sido rodados aquí).
Y para entenderlo tenemos que remontarnos un poquito, “sólo” 30 millones de años. Así observaríamos que la zona de Bardenas Reales corresponde a una gran depresión correspondiente a la Cuenca del Ebro. Los procesos orogénicos alpinos que formaron los Pirineos dieron a su vez lugar a la formación de la Cordillera Ibérica y las sierras Costero-Catalanas que acabaron cerrando a una cuenca totalmente cerrada a la que van desaguando los ríos formando enormes lagos y pantanos. Comienzan así millones de años de sedimentación que, dependiendo de la localización y de la fuerza de agua, irá dejando estratos de rocas (muy grandes), gravas (grandes), arenas (finas), limos (muy finos) y arcillas (muy, muy finas). En sucesivos periodos áridos también se produjeron evaporaciones importantes con el correspondiente depósito de sales. Estos son los elementos actuales que componen el paisaaje de Bardenas Reales.
El el centro de Bardenas Reales tenemos La Blanca, sí la que aparece en la mayoría de las fotos. Corresponde a una gran zona donde predominan los limos y las arcillas y que, dada su escasa resistencia a la erosión, se ha ido hundiéndo poco a poco. Al norte tenemos las grandes planas que, con una fuerte capa de conglomerado, resisten y se elevan en relación al resto. En el sur nos encontramos los cabezos, formaciones tabulares con capas duras en lo alto (areniscas muchas veces y también conglomerados) que protegen de la erosión a las arcillas inferiores. La rotura de esas “tablas” llena las laderas de fragmentos rotos dando ese característico aspecto de derrumbamiento acelerado. El caso más paradigmático de cabezo es el mil veces fotografiado Castildeterra. Otros cabezos famosos son La Ralla, El Rallón o Pisquerra.
A su vez, los procesos erosivos dan lugar a intrincados, largos y numerosos barrancos que confluyen en uno solo al sur de Bardenas Reales.
En resumen, un lugar mágico, de paisajes casi imposibles, desolados, sugerentes, cautivantes, cambiantes, áridos, inhóspitos,… Sólo queríamos introducirte en el origen geológico de lo que hoy vemos, si quieres algo un poquito más serio puedes seguir leyendo AQUÍ
Nosotros no somos especialistas en Geología, pero sí en hacerte disfrutar, durante tu estancia en Uncastillo, de éste y otros muchos parajes sorprendentes.